Para Cultivarse....


jueves, 2 de agosto de 2007

Parte I: La Filosofía en el Tocador de Sade...



"Imperioso, colérico, irascible, extremo en todo, con una imaginación disoluta como nunca se ha visto, ateo al punto del fanatismo, ahí me tenéis en una cáscara de nuez... Mátenme de nuevo o tómenme como soy, porque no cambiaré..."
Marqués de Sade.

.......................................................................


Hablar, y más que nada, analizar La filosofía en el Tocador de Sade, puede resultar un trabajo un tanto complejo y extenso, pero no falto de emoción y pasión.

Donatien Alphonse François de Sade (París, 02/06/1740- Charenton St. Maurice, Val de Marne, 02/12/1814), más conocido como el Marqués de Sade, sutilmente llamado "el Divino Marqués" por sus conocidos e íntimos, fue un aristócrata, escritor y filósofo francés que retrató historias "pornográficas"-así llamadas en aquel tiempo, denominación que perdura en algunos lugares hasta el día de hoy-, con un trasfondo materialista y ateo, en esta obra-y en todas a decir verdad- nos expone su filosofía libertaria llevada al extremo-hay que señalar, que muchas veces su Libertad se tergiversa con su libertinaje-: sin restricción de la Ética, ni las leyes ni mucho menos la religión, buscando el Hedonismo como principio máximo. Escribió la mayor parte de sus obras durante los 29 años de su vida que pasó en prisión(en Vincennes primero, y cuando clausuraron ésta, en la Bastilla, pero OJO, por que cuando se desató la Toma de la Bastilla, él ya no estaba allí). De su nombre procede la palabra sadismo.

La filosofía en el Tocador(1795) relata la educación lasciva de una joven privilegiada. Está estructurada como una obra teatral y es concisa, aguda y atractiva; los personajes arquetípicos de Sade son, aquí, usados eficazmente. El libro contiene un largo panfleto político ¡Franceses! ¡Un esfuerzo más si deseáis ser republicanos! en el cual el Marqués recomienda un socialismo utópico. Declara que las leyes contra los ladrones son absurdas: protegen a los ladrones originales, los ricos, contra los pobres que no tienen otro remedio más que robar. Argumenta además que el estado no tiene derecho a prohibir el asesinato, ya que provocan asesinatos en forma de ejecuciones y guerras. Las leyes en contra de la blasfemia son vistas como sin sentido: no son necesarias si Dios no existe, y si es que existe, seguramente no le dará importancia a ataques insignificantes. El panfleto fue republicado y distribuido durante la Revolución de 1848 en Francia[1].

Si bien el trasfondo que plasma deliberadamente durante una francia convulsionada, Sade nos traspasa sus más intensos deseos de la carne, jugando con nuestra imaginación y nuestra sicología, al poner de manifiesto ideas macabras y fuertes, y que no son comunes a las nuestras.

Concordando con lo que nos expone Rodrigo Salazar(2006) en su ensayo Sade y la Hipocresía: una Lectura Hermeneútica de Filosofía en el Tocador [2], al decir que el discurso es explícito y claro, y no tan trágico(por que no muere alguno de los personajes), aunque el aspecto sexual violento y chocante está presente, podemos darnos cuenta de que esta obra es más un mensaje político que un texto en sí; el argumento es simple: la niña inexperta Eugenia va a hospedarse por unos días en casa de la libertina Madame de Sait-Ange, la cual junto con su hermano-que al mismo tiempo es su amante- el Caballero de Mirvel y con el experimentado y bien dotado Dolmancé, se encargan de demostrar y practicar la teoría del Libertinaje; razonamiento y sexo no convencional durante el resto del texto, y cuando ya va finalizando, la Señora de Mistival, madre de Eugenia-que además tiene un esposo libertino(no por nada Eugenia dió a parar a la casa de Mme. de Saint-Ange), y una moral recta-, se presenta en la estancia para retirar a su hija, es violada, mutilada y contagiada por una enfermedad venérea estando Eugenia presente y siendo partícipe de ello.

La estructura teatral de la obra hace más fluida la interacción entre el autor y el lector, siendo este último quien aporta la nota final a la obra del autor, pero, en un punto no estoy de acuerdo con el señor Salazar(2006): y es que cuando una persona no tiene idea del tipo de literatura que tiene entre sus manos-en este caso en concreto, la obra de Sade-, por su puesto que se va a sentir defraudado, lo cual conlleva a una rabia contenida por dos razones: una, es que al comienzo, la obra es inentendible en el aspecto de lo que plantea, y a veces se vuelve tediosa la lectura, y la segunda, sentir que fue una pérdida de tiempo tanto para nuestro intelecto como para nuestra imaginación y nuestra psique. Creo que, para los que valoramos la obra de Sade, no es una pérdida de tiempo leer su trabajo, y mucho menos un fraude.

Lo anterior se ratifica en que en Sade se puede reconocer un moralista, que recurre a la antítesis de los actos sublimes, para demostrar el inviable camino que conduce a la degradación del cuerpo en su incansable lucha con el espíritu. Quizá, esta obra sea su novela más ambiciosa ya que en ella se exponen, refundidos, los parámetros de una cultura filosófica exasperada, llevados de la mano en una formulación teórica y una aplicación drástica envidiables.

Lo cierto y que nos queda en la memoria, es que como mencionamos en el prólogo anterior, la literatura puede ser todo y nada, en que todo puede pasar, y la nada sobre viene en cada rincón de lo que leemos, por que las situaciones en las que nos pone una lectura del calibre de Sade y otros autores complejos, hacen temblar el intelecto de puritanos y libertinos, de soñadores y materialistas, de religiosos y ateos, y sobre todo, lo más importante, nos demuestra que en el mundo de la Literatura, la irrealidad de las situaciones cargadas de emociones e impulsos violentos nos dan un relajo espiritual y mental, catártico, al no ser víctimas en nuestra realidad de los cuadros violentos y filosóficos, o no por lo menos de una manera literal.

Y para finalizar este espacio dedicado a Sade- y por si muchos no lo entienden tanto-, no se queden con las ganas de leerlo, ni tampoco con mis palabras, si no que al contrario, disfruten de una lectura que les puede servir, en lo que sea, aunque no lo parezca.-

.....................................................

No hay comentarios: